La Navidad no tiene por qué ser signo de atiborrarse a comer turrones, mazapán, polvorones y beber alcohol. Es importante tener presente que los días “críticos” de Navidad son unos 5, contando con la cena de empresa. Pero entre el comercio que nos incita y que muchas veces dejamos de lado la fuerza de voluntad.
¿POR QUÉ ENGORDAMOS EN NAVIDAD?
La Navidad no tiene por qué ser signo de atiborrarse a comer turrones, mazapán, polvorones y beber alcohol. Es importante tener presente que los días “críticos” de Navidad son unos 5, contando con la cena de empresa. Pero entre el comercio que nos incita y que muchas veces dejamos de lado la fuerza de voluntad, los extras de Navidad se alargan de mediados de noviembre hasta pasado Reyes.
Hay que evitar esta tentación y olvidarnos de comprar turrones, panettones, etc. Si no están en casa, no cometeremos la tentación de comer cada vez que pasemos por delante de ellos. Estos, no deben estar presentes en nuestras mesas hasta los días señalados.
Si llevamos una alimentación saludable o hemos empezado hace poco a seguirla, no tenemos por qué abandonarla por el hecho de que llegue la Navidad. Recordamos que los días señalados son solo 5 o 6, el resto de días podemos seguir perfectamente una alimentación equilibrada y saludable.
No hay que olvidar tampoco la rutina habitual de ejercicio físico, ésta, nos ayudará a mantener el peso.
¿QUE COMO EN LOS DÍAS SEÑALADOS?
Si te toca cocinar, aprovecha para elaborar platos ricos y saludables. Generalmente olvidamos incluir verduras en estas comidas y cenas de Navidad, por lo que estaría bien incluirlas, ya sea en forma de crema, ensalada o guarnición.
Evita los fritos, rebozados y salsas ricas en grasas para elaborar los platos principales. Usa cocciones más ligeras como cocinar al horno, vapor o plancha.
Una buena opción es cocinar carnes magras como el pollo, pavo, conejo y evitar las más grasas como el pato, cochinillo y cordero.
No olvides que los entrantes son una gran trampa para picotear sin control. Por eso también es importante escoger opciones saludables, como unas tostadas con hummus o aguacate, rollitos de calabacín laminado a la plancha rellenos de queso, brochetas de salmón con sésamo, etc.
Y por último, los postres. Una opción perfecta para incluir la fruta, como una brocheta de fruta variada con chocolate del 80% o superior, derretido por encima (mejor servirlo con la cantidad justa de chocolate en un plato llano y no en un bol), carpaccio de piña con yogur natural, sopa de melón y menta o al toque de vainilla.
Si quieres seguir unas pautas para llevar una dieta saludable estas Navidades, entra en nuestra página web y descárgate la Dieta de la semana: Navidad.