Día Internacional contra el Cáncer de Mama (19 de Octubre)

Un estudio español, publicado en Nature Communications, indica que las células del cáncer de mama necesitan recoger grasas del exterior y trasladarlas a su interior para proliferar.


Cada 19 de octubre se celebra el Día Mundial del Cáncer de Mama, fecha elegida para celebrar diferentes actos e iniciativas destinadas a dar difusión, visibilidad y concienciar acerca de diferentes aspectos del cáncer de mama, su prevención y su tratamiento.

El cáncer de mama necesita grasa para extenderse

Una investigación del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) en colaboración con hospitales españoles y la Universidad Rovira i Virgili, de Tarragona, ha puesto al descubierto una dependencia del cáncer de mama que podría abrir nuevas opciones terapéuticas para combatirlo.

En España, el cáncer de mama es el tumor más frecuente en mujeres, con más de 25.000 nuevos diagnósticos cada año. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, en el mundo se diagnostican 1,38 millones de nuevos casos y produce 458.000 muertes al año.

Talón de Aquiles

Se conocía que para crecer las células tumorales captan glucosa del exterior al igual que se sabía que reprograman su maquinaria interna para producir muchos más lípidos. La novedad del descubrimiento radica en que por primera vez se pone al descubierto la necesidad de las células tumorales de importar lípidos externos.

«Este nuevo conocimiento relacionado con el metabolismo podría representar un talón de Aquiles para el cáncer de mama». Los científicos demuestran en modelos animales y en células tumorales que bloqueando la actividad de la LIPG el tumor deja de crecer.

Nueva quimioterapia menos tóxica

«Lo prometedor de esta nueva diana terapéutica es que la función de la proteína LIPG no parece ser indispensable para la vida, por lo cual su inhibición generaría menos efectos adversos que otros tratamientos”.  Al ser una proteína de membrana, es potencialmente más fácil conseguir una molécula farmacológica para bloquear su actividad.

Los científicos están buscando ahora alianzas internacionales para desarrollar inhibidores para LIPG. En el trabajo han participado los equipos de Joan Albanell, del Hospital del Mar, Ana Lluch, del Hospital Clínico de Valencia, Federico Rojo, del IIS-Fundación Jiménez Díaz, y Óscar Yanes, del Center for Omic Sciences de la Universidad Rovira i Virgili. El estudio ha recibo el apoyo financiero de la Fundación BBVA, el Ministerio de Economía y Competitividad, el Centro de investigación biomédica en red Ciberdem y de fondos europeos Feder.

Noticia extraída de: DiarioMedico