Comer la piel de la fruta y verdura, ¿Sí o No?

Seguramente todos habréis escuchado alguna vez eso de “comer la piel de la fruta aporta muchas vitaminas”.

Nuestros padres y abuelos son grandes sabios, por lo que si lo dicen es porque tienen mucha razón. Pero no únicamente porque lo digan ellos, sino porque especialistas en nutrición han demostrado que para aprovechar toda la fibra, vitaminas y nutrientes también se debe comer las pieles o las hojas externas de las frutas y verduras. Gracias a ellas podemos mantener la microbiótica intestinal y fortalecer el sistema inmunitario.

Alejandro Cánovas, nutricionista del hotel Barceló Montecasillo, ya advirtió hace un tiempo que “es en la piel donde se encuentran los nutrientes que combaten enfermedades y mantienen el cuerpo y la piel funcionando adecuadamente.” Pero no solo ésta información revelada por un experto ha hecho a muchos recapacitar sino que también, según la OMS, se debe ingerir entre 30 y 35 gramos de esta fibra vegetal al día.

Esta información seguro que no sorprende a muchos, ya que comer piel de la fruta y verduras no es ninguna novedad, aunque siempre hay pieles de frutas y verduras más fáciles que otras de comer, ¿verdad? La sorpresa nos ha venido cuando al parecer, según algunos centros de investigación alimentaria han indicados que también la piel del plátano mongee, una variedad de plátano creado en Japón, se puede comer, ¿alguien se atreve con ella?

La duda para muchos surge con las frutas y verduras que se encuentran hoy en día, y es que muchas de ellas lucen tan brillantes que en algunos casos nos puede causar incluso dudas a la hora de comprarlas. Este brillo se debe a una cera creada a partir de una grasa comestible con las que se cubren las piezas para preservar su deshidratación y sobre todo para llamar más la atención. La cera por si sola no tiene que ser problema, pero este puede ser perjudicial cuando además se le añaden fungicidas para evitar la aparición de moho.

Es entonces cuando a muchas personas se les crea la duda si deben comer la piel, en la cual se encuentra la mayoría de la fibra, o si de lo contrario es mejor evitarlo debido a los otros componentes químicos que pueda tener. En este caso, siempre es mejor optar por aquellos productos ecológicos libres de pesticidas u otras sustancias. Pero en algunos casos esto puede resultar difícil de controlar. Por ello, es importante que antes de consumir el alimento este se limpie bien con abundante agua, y de ser posible se eche mano de un desinfectante alimenticio.

Seguramente todos conoceréis aquellas frutas y verduras más comunes que suelen comerse su piel, pero por si tenéis alguna duda, os hacemos un breve recorrido por algunas de ellas.

piel de manzana

Manzana

Seguramente es la fruta que más gente come su piel y es que la piel de la manzana es rica tanto en ácido ursólico, el cual facilita el crecimiento de los músculos evitando su desgaste como en quercetina, un flavonoide que ayuda en las funciones antidiabéticas y antioxidantes. Tomar una manzana al día es salud asegurada. Gracias a sus múltiples nutrientes, éstas también nos ayudan a activar el colágeno, son grandes aliadas para los deportistas, nos ayudan a controlar los niveles de colesterol y glucosa en sangre y además ayuda también a reducir los problemas de sobrepeso.

Pera

La piel de la pera, del mismo modo que de la manzana, es fácil de ingerir y además de estar rica también nos aporta grandes beneficios al organismo. La piel de la pera es rica en pectina, la cual ayuda en la reducción de grasa corporal y el aumento de la masa muscular. Además, gracias a la fibra que contiene, nos ayuda a prevenir el estreñimiento a la vez que controla los niveles de colesterol y ofrece un efecto saciante. Pero no solo eso y es que comer la piel de la pera también nos aporta agua, lo que favorece la eliminación de toxinas y por lo tanto nos ayuda a depurarnos.

piel de uva

Uva

Para todos aquellos que cada 31 de diciembre están quitando la piel a las uvas, deberíais saber que estáis eliminando una gran fuente de nutrientes. En la piel de la uva se encuentra el resveratrol, una potente enzima que ayuda a nuestro organismo en múltiples funciones. Permite reducir los niveles de colesterol en sangre y ayuda a combatir los radicales libres, entre otros muchos. A  partir de ahora, antes de quitar la piel de la uva tomad conciencia y aprovechar todo el fruto.

Plátano

El plátano, es un alimento muy rico en potasio, magnesio y vitaminas, las cuales también se encuentran en su piel. Pero además, también la piel del plátano también tiene triptófano,que ayuda en los momentos de bajada de ánimo o depresión y estabiliza los niveles de serotonina en el cerebro, el cual permite estar de mejor humor.

Naranja

Sí, quizás si pensáis en dar un bocado directamente a la piel de naranja puede ser un tanto desagradable, pero si supierais todos los beneficios que esta nos aporta quizás lo veríais de otra forma. La piel de la naranja cuenta con propiedades antiinflamatorias, las cuales facilitan las digestiones. También, la cáscara de la naranja es rica en vitamina C, la cual ayuda a combatir los radicales libres. Si no sabéis cómo tomar cáscara de naranja, os sugerimos que la añadáis a vuestras infusiones o bien la introduzcáis también en algunos bizcochos o postres. También esta se puede triturar y añadir en el zumo natural.

piel de mandarina
piel de mandarina

Mandarina

Si la piel de la naranja se puede comer, también puede hacerse con la de mandarina. La piel de la mandarina es rica en Salvestrol Q10, un compuesto altamente eficaz contra diferentes tipos de cáncer. Del mismo modo que la naranja, también la puedes añadir a tus zumos triturándola.

Limón

Dentro del grupo de los cítricos también encontramos el limón, el cual también es muy rico en este antioxidante natural llamado “Vitamina C”. También la vitamina A, la cual ayuda a ala regeneración de la piel, así como la fibra y el fósforo que la piel del limón contienen, la convierten en una piel ideal para comer y beneficiarse de ella.

Kiwi

Sí, habéis leído bien, también la piel del kiwi es beneficiosa para el organismo y se puede comer. Bastará con eliminar los pelos que esta contiene lavándola muy bien previamente. Quizás no es tan agradable como pueda ser la comer la piel de la manzana o pera, pero si si sabéis que esta es cuenta con un alto poder antioxidante que ayuda a prevenir el envejecimiento celular y también es beneficioso en casos de anemia y enfermedades cardiacas seguro que comenzarás añadirlo en vuestros desayunos.

piel de la granada

Granada

Del mismo modo que la fruta anterior, aunque muy distintas, la piel de la granada también cuenta incluso con más nutrientes que la propia fruta en sí, que ya son. La cáscara de la granada es muy rica en antioxidantes y según estudios realizados, se trata de una de las mejores fuentes de sustratos microbianos a nivel del colon. Si no sabéis cómo comer la piel de esta fruta, os aconsejamos que la añadáis a las infusiones o bien también la podéis triturar y añadir a vuestros yogures o cereales.

Patata

Potasio, fósforo, magnesio, zinc y hierro, son algunos de los minerales que contiene la piel de la patata. La piel de la patata está formada en un 20% de vitaminas B y C y es un alimento perfecto para mantener los niveles de glucosa y colesterol en sangre. Además se trata de un perfecto saciante y se puede comer de forma fácil ya sea hervida, al horno, a la plancha o como deseéis.

piel del pepino

Pepino

El pepino es un alimento con múltiples beneficios, y su cáscara no iba a ser menos. Contiene un alto nivel de fibra, la cual ayuda a limpiar el tracto digestivo y además también previene el estreñimiento. Además, cuenta con vitamina K, que ayuda a mantener los huesos más fuertes y favorece el crecimiento celular.

Berenjena

También la piel de la berenjena es fácil de consumir a la vez que nos proporciona grandes beneficios. Esta contiene Nasunina, un antioxidante que repara el daño celular. Además, también es un gran aliado para la reducción de los niveles de colesterol en sangre.